Plano de Olhao (dcha)
Plano de Olhao (izquierda)
Plano de Olhao (reverso)
Plano de Olhao ( islas de Armona, Culatra y Farol)
Mami y Juan Lucas delante iglesia
Museo Municipal Olhao
Iglesia Ntra Sra del Rosario
Tomando refrescos en la Cafetería Scala
Fachada Museo Municipal con maceteros de proas de barcas
Mami y rótulos de farmacia antiguos
Maceteros de proas de barcas
Casa típica
Papelera con forma de lata de conserva
empedrado característico
Barco "Bom Sucesso" (réplica del que usaron para avisar al regente D. Joao que habían expulsado a los franceses, el rey le concedió el título de Villa de la Restauración
Mercado
Mercado
Juan Lucas en el interior del mercado
kioscos de venta de entradas para paseos marítimos
graffitis de la actividad pesquera y conservera
graffitis de la actividad pesquera y conservera
graffitis de la actividad pesquera y conservera
Ruta de las iglesias de Olhao
Papis y Juan Lucas comiendo en "Tacho á mesa"
Papis y Juan Lucas comiendo en "Tacho á mesa"
En la canoa para la isla de Culatra
Infraestructuras de cultivo de moluscos (pensamos que almejas)
cuadrito en un bar de la isla de Culatra
Papi en sendero nuevo con buganvilla
"El gordo y el flaco" en Culatra
Juan Lucas y la pasarela hasta la playa
Playa atlántica de la isla de Culatra
Playa atlántica de la isla de Culatra
Mami y el agua transparente de la playa de Culatra
Nuestro asentamiento culatreño
Juan Lucas y la playa de Culatra
El descanso del ballenato
Aguas atlánticas transparentes
Aguas atlánticas transparentes
Papi en la pasarela de vuelta de la playa de Culatra
Isla de Farol
en la canoa de vuelta a Olhao
Juan Lucas contento de la experiencia
Artur Pastor , un fotógrafo local, nos recordó al abuelo Paco "Durán"
Portada del libro que nos regaló Arturo Marqués, mantenedor del museo municipal
Fabricas de conservas de los años 50
Marcas de conservas fabricadas en Olhao
Barco "Bom Sucesso" y la historia de su travesía hasta Brasil
La ría Formosa de la costa portuguesa en el XVII
Tickets de pago en autopista y billete de canoa a la isla de Culatra
factura del almuerzo en Tacho á mesa y ticket de compra de Pago doce
Ruta de iglesias
Ruta de iglesias
ruta de Iglesias
Ruta de iglesias
Rutas de iglesias
Ruta de iglesias y fachada Museo Municipal
EXCURSION A OLHAO Y CULATRA
, le pude decir a Ana como veinte veces que teníamos que parar en el puesto de
control de las tarjetas de crédito para el pago de las autopistas, esta vez no
íbamos a estar con la preocupación de si teníamos que pagar; nos acercamos al Armenio ( rodeado por un restaurante
moderno , Ría Formosa, sin alma ninguna (más limpio, pero con menos encanto) ,
como era segunda feria (lunes) estaba cerrado; nos acercamos a Olhao, dejamos
el coche en un descampao , estuvimos buscando el bar de hacía 5 años ( Come,
Come) pero estaba convertido en una agencia inmobiliaria, hicimos un recorrido
muy interesante por este pueblo de pasado industrial (debió ser importante por
las fábricas de conservas ) ¡¡el graffiti espectacular de las paredes de la
antigua fábrica así lo atestigua ¡! , en el paseo por Olhao descubrimos iglesias, casas burguesas, casas humildes ,
(como la mayoría del urbanismo del Algarve ) muy armonioso, nos paramos delante
de la fachada de la iglesia de Ntra .Sra. del Rosario, (XVIII) , en el bar Scala,
tomamos unas coca colas, en unos vasos imitando a una lata de un refresco de
Pedrás Limao , estuve al quite , vi salir a un hombre del Museo Municipal que
estaba cerrado , tuve dudas si debería ir a abordarlo para preguntarle por un
sitio de comer, finalmente me decidí y menos mal que lo hice : ¡¡¡ a raíz de
ese encuentro vivimos un momento muy interesante ¡! : era Arturo Marques, entró
en su taller de mantenimiento del Museo Municipal, tenía mucho encanto, estaba
lleno de maquetas de barcos , le pregunté por la maqueta del barco “Bom
Sucesso”, me explicó ( en portugués, pero lo entendí muy bien) que ese barco
fue fletado en Olhao para ir a avisar al regente Don Joao, que habían
conseguido expulsar a los franceses del Algarve, Arturo me dijo que el regente
no quiso volver y fue el primer rey de Brasil, la villa de Olhao fue reconocida
y se le añadió la expresión “de la Restauración”, volví a la Cafetería Scala ,
vi que salía Arturo de su taller, nos venía a traer el libro catálogo “Olhao y
su historia” , le di las gracias , le pregunté donde comer , me recomendó el
restaurante Largo ( ) [estaba en una esquina], como estaba cerrado , le
preguntamos a un hombre que pasaba , nos recomendó “Tacho á mesa “ (cacerola a
la mesa) , estuvimos muy a gusto (aunque las flores falsas de decoración no nos
convencieron) , nos tomamos : unas samosas de pollo con crema de mostaza
antigua, bife de ternera con patatas y huevo frito, carapaos (jureles) a la plancha
y bacalao a la bras ( que resultó ser bacalao dorado), tomamos cerveza Sagres y
vino da Quinta Aveleda, de postre mousse de lima ; nos acercamos a por las
sillas y la sombrilla, cogimos la canoa hasta la isla de Culatra , (con buen
criterio no dejan subir los equipajes voluminosos a la parte panorámica, obligan
a dejarlos en un espacio de la proa ), en ruta a Culatra , han mejorado los
caminos de cemento, está más “urbanizado”, pero sigue teniendo el encanto de un
lugar salvaje (habían incorporado el programa SUP [single use plastic) , para
usar y reciclar , recordamos la pasarela de tablas,. recordamos las flores
amarillas ( manzanilla bastarda) [hace cinco años, cuando estuvimos por aquí ,
Mami se las refregó por las palmas de las manos y estuvimos teniendo el
recuerdo de su olor mucho rato] , llegamos al paraíso de la playa, el agua era
muy transparente, apenas había gente , ¡¡¡éramos los únicos con sillas y
sombrillas ¡!!, fue una experiencia maravillosa , el agua era refrescante,
hasta el paso de los aviones, cada cinco minutos, para el aeropuerto de Faro, no resultaba nada
chocante , estuvimos un par de horas y nos volvimos para coger la canoa de
vuelta; estuvimos comprando en el supermercado Pago Doce: latas de conservas,
quesos, mantequilla y viño verde, fuimos a recoger a la abuela que habían
tenido la visita de las primas Durán de Gibraleón ( no lo supimos hasta que
llegamos a La Antilla por no tener los teléfonos activados
