martes, 2 de abril de 2024

CAPILLAS CATEDRAL: CAPILLA DE LOS EVANGELISTAS Y ALTAR DE LA ASUNCION

 



Viga con decoración cardina (de cardo) 

Detalle de viga con decoración cardina (de cardo) 

Retablo de Hernando de Esturmio



Cuadro central Misa de san Gregorio

Resurrección 














Pintura en la pared oeste


 

Evangelistas 


Los 4 evangelistas juntos 

San  Pedro de Arbúes 
Copia de Joaquín Cortés de la obra de Murillo 




Vidriera de Arnao de Flandes (1553)










Asunción policromada por Alonso Vázquez 

reja del Altar de la Asunción 

Altar cerámico de azulejo plano ajedrezado 

Asunción policromada por Alonso Vázquez 

Arcosolio con ángeles músicos 

Arcosolio 

El patrono y su hijo 

La patrona y su hija 

Arcosolio 

Arcosolio 

lateral del retablo

Asunción policromada por Alonso Vázquez 



Martes 2-4-24 (VISITA) CAPILLAS DE LA CATEDRAL CAPILLA DE LOS SANTILLANES O DE LOS EVANGELISTAS / ATRIUM / Guía Emilio Rubio (que estaba muy perjudicado después de llevar un estandarte el Sábado Santo ),  enterramientos de los marqueses de la Motilla, Beaumon-Solis,  continúa el linaje ; Ortiz de Zúñiga habla que el primer patrono fue Rodrigo de Santillán, arcediano de Écija, que la dota en 1530 para su enterramiento y el de su familia, dado que el Cabildo actual considera esta capilla la de Palabra de Dios, aquí se expone  (autorizado por la familia titular del Patronazgo) , tres tomos facsímile de la Biblia de san Luis que se conserva en la Catedral de Toledo, se ha hecho un edición facsímile  junto con la editorial Moleiro, de la Biblia de San Luis aquí expuesta,  son 3 tomos con cerca de 5000 ilustraciones;  viga con decoración de cardina (cardo pintado)  también la hay labrada en piedra con escudos de los Santillán con castillos también aparece el escudo en la vidriera de 1553, este espacio viene de la mezquita cristianizada, el linaje de los Santillán es de origen escocés,  esta es la parte más antigua de la Catedral,  por el tipo de moldura  y nervios de la nervadura y por tratamiento de la piedra, esta parte es la más antigua,  los antepechos (yo tenía entendido que se llamaban tribunas) , donde descansa la reja , son los originales de mediados del siglo XV,  la capilla es de 1527 las obras de adecuación exterior de la Catedral y las de interior, en 1930 le dieron la configuración definitiva;  el caballero Domingo Polo de Santillán,  casado con María Sandoval (esta dama aporta el azul al escudo),  Santillán de origen escocés por su fidelidad a un rey escocés,  van a Italia después aparecen por España,  en el siglo XIII  en la toma de Sevilla y después hay notables personajes de este linaje en los territorios americanos;  Arquitectura: La capilla responde al plan general constructivo del templo según el diseño atribuido al maestro Isambret. Conserva los antepechos originales que sustentan los laterales de la reja.   la sillería  y el facistol (ahora en otro lugar) son elementos que se han incorporado pero no pertenecen al patrimonio original;  el  molduraje  la capilla originalmente en el templo de la mezquita cristianizada estaba bajo la advocación de San Gregorio ( de ahí el cuadro central del retablo) , las pinturas de San Juan Bautista cuadro de los cuatro evangelistas es raro que aparezcan juntos cuatro y de origen flamenco la composición de esquema complejo obra de maestro importante parte central,  cuadro SAN PEDRO DE ARBÚES asesinado por judíos conversos,  fue el primer Inquisidor General de Aragón,  sirvió de excusa para que Fernando III tomará represalias contra los judíos que mantenían los puestos clave de la administración,  llevaba una malla medieval protectora,  no le sirvió, lo mataron por el cuello, este es una copia del original de Murillo ,  lo tenían en el castillo de la Inquisición,  Godoy encargó a Joaquín Cortés una copia,  Joaquín Cortés se especializó en estos “adecentamiento de expolios” o sea,  en hacer copias de cuadros que habían robado;  el original está en el Museo del Ermitage de San Petersburgo;  otra obra con esta temática está en el Vaticano,  a Murillo este tratamiento tenebrista no le gustaba, este estilo de fuertes contrastes,  el cuadro lo encargaron los inquisidores de Sevilla, cuadro LOS CUATRO EVANGELISTAS de la escuela flamenca:  San Lucas con el toro, San Marcos con el león,  San Juan con el águila y  San Mateo;  VIDRIERA de Arnau de Flandes,  los vidrieros Arnau de Vergara y Arnau de Flandes, vienen por el gran programa constructivo del cardenal Mendoza,  antes que Arnau de Flandes  vino Arnau de Vergara , venian de Burgos se formaron en Flandes,  Arnau de Flandes hizo una serie de vidrieras de santos y después otra con la vida de Cristo,  aquí destacan el amarillo de plata y los paisajes,  con rompimiento de Ángeles,  técnicas de mufla (vidrio pintado al horno) ; Arnao de Flandes importante como Hernando de Estormio o Pedro de Campaña utilizan las estampas de Durero,  la vidriera tiene el escudo de los Santillán,  la colección de vidrieras renacentistas en la Catedral de Sevilla es de las más importantes de Europa;  retablo RETABLO de Hernando de Esturmio , estuvo en Bruselas,  se formó con Pedro de Campaña, vinieron a Sevilla ,  el retablo lo hizo Hernando de Esturmio , porque Pedro de Campaña tenía muchos encargos , entre otros la iglesia de Santa Ana, lo presionaron por ser extranjero y se volvió a Bruselas , aquí se cumple con él el estilo del naturalismo nórdico pierde la observancia del natural para hacerse más aparatoso,  casi como Miguel Ángel , el manierismo (es la nueva manera)  Rafael, Miguel Ángel y Tiziano ; Rafael y Miguel Ángel inspiran los personajes de medio cuerpo,  figuras de perfil influencia de la numismática (los Fernández de Rivera, Adelantados de Castilla en Andalucía)o,  casa de Pilatos, traen de Italia una gran colección de numismática, la colección procedía de Italia,  figuras, composición y otros elementos figuraban en el contrato,  la parte central del retablo de la MISA DE SAN GREGORIO pintura flamenca tiende a lo profano y la pintura italiana tiende a la fantasía,  la RESURRECCIÓN arriba; a los lados los EVANGELISTAS ; Hernando de Esturmio era poco original,  sin embargo Pedro de Campaña y Luis de Vargas son creativos,  son muy originales,  las pinturas del banco son muy valoradas; Sebastián de Obregón obispo de Marruecos,  arcediano de Carmona,  lo encarga por mandato del Marqués de Santillan,  SANTA JUSTA Y RUFINA visión de la Catedral,  perfil heráldico;  SANTA CATALINA Y SANTA BÁRBARA con anillo,  edificio en construcción,  Capilla de la Palabra de Dios expone los tesoros de la Biblioteca Catedralicia, tesoros bibliotecarios de la BIBLIA DE SAN LUIS la encarga Blanca de Castilla para la educación de su hijo San Luis rey de Francia, tiene 4887  ilustraciones muestran las costumbres del siglo XIII ,  los ropajes y la sociedad de la época;  CAPILLA DE LA ASUNCIÓN capilla encargada por Juan Cristóbal de la Puebla y Catalina de Acosta conjunto atribuido a Alonso Vázquez, aunque la policromía si es obra suya  , las tablas con jaspeados imitando mármol tapaban el altar de azulejos de Pisano,  el relieve de la ASUNCION el relieve se atribuye también al pintor Alonso Vázquez , la capilla se concede en 1523,  pero en 1593 se hace la REJA y en 1594 el RETABLO , Alonso Vázquez hace el retablo del Hospital de las 5 llagas y el túmulo de Felipe II; el trabajo del relieve puede ser de López Bueno o Núñez Delgado,  Alonso Vázquez es el policromador de Martínez Montañés por ejemplo en el San Cristóbal de la iglesia del Salvador,  se piensa que el relieve es un conjunto pictórico muy notable, pero Alonso Vázquez hizo obras de policromía asociadas al estilo flamenco y otras al estilo italiano, ;  BANCO con profetas y Reyes de Israel combinados,  todavía son renacentistas (horizontal) el ARCOSOLIO con ángeles músicos tocando una Lira,  manierista sevillano pintado en el siglo XVI , Alonso Vázquez es llevado a América , lo lleva el virrey, Marques de Montesclaros,   pinturas de san Ildefonso   y Fray Diego de Alcalá , los dieguinos , el conjunto se identifican con los temas del Bautismo de Cristo, Martirio de santa Catalina, Ángeles Músicos, Alegorías de las Virtudes y El Padre Eterno ; azulejo plano  pintado (ajedrezado) siguen a Niculoso Pisano. esta  forma geométrica y el estilo (plano) es muy raro para esa época, distinto del de arista;  los altares normales  hasta el XVIII eran de azulejos,  a partir del siglo XIX  se quitan las tablas jaspeadas imitando mármol y se recuperan algunos altares de azulejos

 

FICHAS ATRIUM

CAPILLA DE LOS EVANGELISTAS Cronología: H. 1445 Autores: Carles Galtés de Ruan (Maestre Carlín) DATOS HISTÓRICOS. Se ubica esta capilla en el lado del evangelio de la cabecera del templo que, según ya vimos al abordar el estudio de la vecina capilla de las Doncellas, la bibliografía tradicional vincula con el quehacer del maestro Juan de Hoces hacia el año 1496, si bien ya entonces apuntábamos que una serie de características (como la mayor profusión decorativa en los pilares que la flanquean o el más rico molduraje de su arco de acceso) nos impulsan a vincularla con la obra del maestre Carlín, en cuyo caso habría que retrasar su cronología hasta 1445, integrándose en la primera fase constructiva del templo. Su aspecto actual data de la restauración de 1927 promovida por el capitán de fragata Miguel Desmassières y Farina, IX marqués de la Motilla, descendiente del fundador. PATRONATO. En el muro izquierdo una lápida recuerda a Domingo Polo de Santillán, caballero escocés que llegó a Sevilla con Fernando III, y que emparentó con las familias de mayor alcurnia del momento, siendo sus descendientes actuales los marqueses de la Motilla (linaje Solís-Beaumont). Ortiz de Zúñiga refiere, por otra parte, que el primer patrono de la capilla fue Rodrigo de Santillán, arcediano de Écija, que la dota en 1530 para su enterramiento y el de su familia, de donde proviene el nombre tradicional de capilla de los Santillanes con que la refieren las fuentes antiguas. Creemos que Zúñiga habla de una dotación establecida sobre el mismo espacio de otra anterior, que dataría de la mezquita cristianizada, capilla que entonces se advocó de san Gregorio o san Sebastián, cuyo patronato, una vez terminada la nueva catedral en 1530, se actualizaría. El retablo lo sufragó en 1553 Sebastián de Obregón, obispo de Marruecos y canónigo de la catedral, que actúa en nombre del también canónigo Pedro de Santillán, patrono en ese momento. En la lápida fundacional del altar leemos “AQUÍ YACE EL REVERENDO Y NOBLE SEÑOR DON RODRIGO DE SANTILLÁN, ARCEDIANO DE ÉCIJA, QUE DOTÓ ESTA CAPILLA, Y EL DEAN DE JAÉN DON FRANCISCO DE SANTILLÁN, Y DON DIEGO DE SANTILLÁN, TODOS CANÓNIGOS DE ESTA SANTA IGLESIA DE LOS CUALES Y DE LOS OTROS SUS HEREDEROS Y SUCESORES ES EL ENTIERRO Y CAPILLA…”. Otros integrantes de este linaje poseyeron patronatos de enterramiento en los conventos de san Pablo (desde el siglo XIV) y san Francisco (desde principios del XV). DOTACIÓN ARTÍSTICA. Arquitectura: La capilla responde al plan general constructivo del templo según el diseño atribuido al maestro Isambret. Conserva los antepechos originales que sustentan los laterales de la reja. Retablos y esculturas: No tiene. Pintura: El retablo principal se encarga al pintor holandés Hernando de Esturmio en 1553. Este artista aparece en Sevilla al menos desde 1537 como vecino del barrio de san Andrés. Su carrera se desarrolla en la estela de Pedro de Campaña, que llega a la ciudad el mismo año, y que marcará su evolución estilística. Cuando Esturmio concluye 1555 el retablo que comentamos, Campaña ya trabaja en su obra maestra, las pinturas de la capilla del mariscal Diego Caballero. Los dos artistas parten de las mismas premisas, sobre todo grabados de Durero, Miguel Ángel y Rafael, pero mientras Campaña reelabora y acentúa los ritmos, Esturmio se complace en una copia servil. La evolución de estos artistas irá desde el naturalismo nórdico hasta el manierismo romano, que aparece a partir de 1550. La corrección en el dibujo y el dominio de la técnica pictórica, junto a la gran demanda de pintura religiosa que se da en Sevilla por esos años, le proporcionan a Esturmio una exitosa carrera, plagada de encargos, para los que incluso tuvo que ampliar su taller con varios aprendices. El retablo que nos ocupa está compuesto por banco y dos cuerpos de tres calles. En la central encontramos, en el cuerpo inferior, una Misa de San Gregorio, y en el superior la Resurrección. En la calle izquierda aparecen los evangelistas San Lucas (inferior) y San Juan (superior), mientras en la derecha vemos a San Marcos (inferior) y a San Mateo (superior). En el banco, también dividido en tres calles, encontramos a las Santas Justa y Rufina a la izquierda, San Antonio, san Juan Bautista y san Sebastián en el centro y Santas Catalina y Bárbara a la derecha. Destacamos el brillante cromatismo, la cuidada ejecución de los pormenores y los fondos, así como las figuras ejecutadas de perfil, que nos recuerdan la influencia que la numismática tuvo en todos los autores del renacimiento sevillano. En el contrato se especifica con rigor la iconografía, y así leemos “en el tablero de en medio san Gregorio dice la misa alzando el santo sacramento con dos diáconos, la casulla, más dos o tres cardenales y el altar con todo el servicio y delante del santísimo todas las armas de la pasión…”, o “en los cuatro tableros (laterales) evangelistas que tengan insignias y sean tan grandes como se puedan hacer en los tableros”, o “en el banco han de ser pintados tres medios santos en el del medio…,…en el lado derecho dos medias santas…”. Se deduce de una primera lectura que el margen de iniciativa por parte del artista se reduce a lo mínimo, pues hasta los pequeños detalles se refieren en el contrato. En cuanto a la historia material del conjunto nos llama la atención que en 1598 el cabildo contratara al cetrero Martín Alonso de Castro para que “aderezara” las tablas, entendemos que por haber anidado en su parte posterior alguna especie de ave, posiblemente lechuzas, cuyos nidos habrían de ser retirados. Del contrato con Alonso se concluye que se pagaría una cantidad fija por cada animal eliminado. Por otra parte apuntamos que algunas tablas han sido ocasionalmente retiradas para integrarse en exposiciones temporales, y así las Santas Justa y Rufina se pudieron ver en El Emporio de Sevilla (Caja San Fernando, 1995) o en Arte del Renacimiento en Sevilla (Museo de Bellas Artes, 2023) y las Santas Catalina y Bárbara en Velázquez y Sevilla (CAAC, 1999). En el muro frontero a la entrada se aprecia una pintura con el tema de El martirio de san Pedro de Arbués, obra de 1804 debida al pintor neoclásico Joaquín Cortés. Se trata de una copia de un lienzo de Murillo (hoy en el Ermitage de San Petersburgo), al parecer encargada por Godoy para disimular el impacto del expolio de la obra original que se encontraba en la capilla de Inquisición, en el interior del castillo de Triana. Cuando en 1812 esta institución desaparece la obra pasa a la catedral. La coincidencia de medidas entre esta pintura y la original induce a dar veracidad a esta versión de los hechos. La escena está captada en el momento del sacrificio del diácono español, cuando dos verdugos se disponen a clavarle sus puñales, que blanden en alto. En el ángulo superior izquierdo de la composición un ángel le enseña la palma de su martirio y le señala el camino hacia el cielo. El santo ostenta una expresividad muy lograda; su tipo y sus ropajes, así como los de sus asesinos e incluso los del ángel están muy bien captados en su colorido y dibujo. Existe otra versión de Murillo en el Museo Vaticano. Un conjunto interesante de pinturas se disponen por los muros norte y oeste de la capilla. Al parecer en su mayoría proceden de dos retablos desmontados que en principio se ubicaron en la Sacristía Mayor, siendo ejecutados por el racionero de la catedral Diego Vidal el Joven, sobrino de Diego Vidal el Viejo, de quien debió heredar el cargo catedralicio y su afición por la pintura. Su actividad en Sevilla debe situarse en el segundo cuarto del siglo XVII, mostrando sus obras una escasa originalidad ya que están todas inspiradas en grabados. Entre las conservadas identificamos en el muro oeste un San Juan Bautista y un San Pedro, copias del mismo tema de originales de Andrea del Sarto. En el muro norte aparece una serie de cuatro lienzos de los Evangelistas, obras de escuela flamenca del siglo XVII. Otros lienzos de escuela española del XVII representan a San Diego de Alcalá y a San Sebastián. Artes Suntuarias: La reja es obra de principios del XVI, ostentando en la viga escudos de la familia Santillán. Posee la capilla en el perímetro una serie de bancos a modo de coro y un facistol en el centro, de origen desconocido. La vidriera que preside el espacio es obra de 1553 de Arnao de Flandes y representa el Nacimiento. Este vidriero se sitúa en el contexto del manierismo sevillano en un plano equiparable al que representan Pedro de Campaña o Esturmio en pintura. La realización de las últimas vidrieras de la serie de santos para el crucero coincide con el inicio del segundo ciclo realizado por Arnao de Flandes para la catedral, dedicado a la vida de Cristo, al que pertenece la que comentamos. El fondo del paisaje y las arquitecturas, y especialmente los rostros de las figuras, abandonan los procedimientos específicamente vidrieros habituales para traducirse en una pintura sobre el vidrio. Como capilla temática de la Palabra de Dios el Cabildo se ha propuesto exponer en este ámbito distintos ejemplares de las biblias históricas que conserva la Biblioteca Capitular y Colombina. En estos momentos podemos admirar la Biblia de San Luis, edición facsímile que donara el arzobispo emérito Monseñor Asenjo. Se trata de una obra ilustrada en Francia entre 1226 y 1234, encargo de doña Blanca de Castilla, cuyo original se guarda la en la catedral de Toledo. La Biblia consta de 4887 escenas iluminadas, ocho por cada página. Las miniaturas son un espejo de la Francia del siglo XIII y aportan un amplio repertorio de vestimentas y costumbres.

 ALTAR DE LA ASUNCIÓN Cronología: 1523 Autores: Anónimo DATOS HISTÓRICOS. El altar de la Asunción se encuentra junto a la puerta de los Palos, entre ésta y el muro lateral de la capilla de san Pedro. Este entorno arquitectónico, uno de los últimos en rematarse del interior del templo, pudo ser concluido por el Maestro Juan Gil de Hontañón antes de 1519. PATRONATO. La capilla es fundada por el jurado Juan Cristóbal de la Puebla y su esposa en 1523 para enteramiento propio y de sus descendientes, si bien las obras de arte que lo adornan son de finales del XVI. Sabemos, gracias a la investigación de López Martínez, que las pinturas se contratan con Alonso Vázquez en 1594. En los laterales del banco aparecen dos tablas con excelentes retratos de los patronos. DOTACIÓN ARTÍSTICA: Arquitectura: La capilla no presenta obra arquitectónica, pues su retablo, que imita la forma de un sepulcro en arcosolio, se sitúa en un sencillo espacio sin decorar abierto en el muro de los pies del templo. Retablos y esculturas: Preside la capilla un retablo anónimo de 1593 en cuya calle central figura un relieve con la Virgen de la Asunción, de autor desconocido aunque con magnífica policromía de Alonso Vázquez, quien por entonces era habitual colaborador de Juan Martínez Montañés. Con respecto a la autoría del relieve se ha venido repitiendo su proximidad a los modelos de Bautista Vázquez, si bien la cronología del contrato no apoya esta teoría, pues Vázquez fallece en 1588. Nos atrevemos aquí a vincularla con la producción de Núñez Delgado por similitudes con la Inmaculada que este autor diseña para la parroquia sevillana de San Andrés, dentro del proyecto de un retablo de características parecidas al que aquí observamos y donde también trabaja como policromador Alonso Vázquez. Otro posible autor del relieve y aún de la traza del retablo pudo ser Diego López Bueno, del que conservamos una Inmaculada en la parroquia de Santa Catalina que también recuerda a la Asunción que comentamos. Sobre la mesa de altar se ha situado recientemente una imagen del apóstol san Judas Tadeo, del siglo XVIII, de gran devoción en nuestra ciudad. Pintura: Las pinturas y policromía del retablo se contratan con Alonso Vázquez en 1594. La obra pictórica de Vázquez destaca por la solidez de su dibujo, que se convierte en la auténtica estructura de la obra, sobre la que desarrollará el cuidado efecto tonal de sus colores. Tiene un estilo muy variado en sus obras; en la Santa Cena (que, procedente de la Cartuja, se conserva en el Museo de Bellas Artes de Sevilla) se fija en los detalles propios de la escuela flamenca, mientras que en La Virgen del Valle y en otras obras posteriores muestra una serenidad más cercana a Rafael. Otro de los rasgos más representativos su obra, claramente apreciable en este retablo, es la impronta escultórica que muestran todas sus figuras, así como la composición geométrica con claras formas Striangulares y redondas cuya yuxtaposición va componiendo por sectores la obra. De igual forma se aprecia un respeto por la tradición y corrección iconográfica en todos sus temas. En la capital hispalense permanecerá hasta 1603, momento en que decide trasladarse a Méjico para entrar al servicio del marqués de Montesclaros, virrey Nueva España. Su muerte se produjo allí poco antes de 1608, influyendo en el desarrollo de las escuelas locales. En cuanto a la iconografía del retablo el relieve central se encuentra enmarcado por las imágenes de san Ildefonso y san Diego de Alcalá. Por debajo, en el banco, además de los retratos ya referidos observamos una tabla de acusado formato horizontal donde aparece una representación de Profetas y Padres de la Iglesia. Otras pinturas distribuidas por el conjunto se identifican con los temas del Bautismo de Cristo, Martirio de santa Catalina, Ángeles Músicos, Alegorías de las Virtudes y El Padre Eterno. Artes suntuarias: Se cierra la capilla con interesante reja de 1593 rematada en crestería. La mesa de altar se recubre con azulejos de finales del siglo XVI que siguen un esquema de los llamados de ajedrezado, con casillas de colores alternos que incorporan motivos florales. Se trata de azulejos planos pintados, o pisanos, introducidos en Sevilla en torno al 1500 por Francisco Niculoso y recuperados a finales del siglo XVI por el ceramista Cristóbal de Augusta. Estos modelos seriados eran mucho más económicos que las complejas composiciones que imitaban el textil. Su deterioro en el siglo XVIII determinó que buena parte de estos frontales fuesen cubiertos por maderas que imitaban jaspes. Así ocurrió con los azulejos que cubrían la mesa de altar de la capilla de la Asunción. En la década de 1970 una intervención retiró la cubrición de madera y restauró el frontal y la mesa de altar, si bien desde entonces hasta ahora su deterioro ha ido en aumento. Este tipo de azulejo fue muy repetido por los alfares sevillanos de finales del XVI, sustituyendo en parte a la producción de arista, hasta entonces predominante. La fecha de la obra que nos ocupa debe aproximarse a 1593, año que figura en la reja que cierra la capilla. Junto al muro derecho exterior de la capilla se sitúa un cofre limosnero ejecutado por el rejero Juan Barba en 1572. Se trata de una buena pieza compuesta por balaustre y tornapuntas que recogen un arca con cepillo. Todas estas labores se construyeron en hierro, siendo posteriormente doradas y policromadas por el pintor Antón Pérez, habitual colaborador de Barba en otras labores de metalistería de la catedral. Nada queda, sin embargo de esta decoración pictórica, pues aunque la obra se conserva en su ubicación original, junto a la puerta de Palos, una restauración poco afortunada eliminó esta decoración para pintarla de negroN JUDAS TADEO, ANÓNIMO, SIGLO