martes, 27 de febrero de 2024

CAPILLAS DE LA CATEDRAL: CAPILLA DE SAN LAUREANO Y CAPILLA DE LOS JÁCOME

 

Plano de la Capilla de San Laureano 

Reja de la Capilla de San Laureano

Laudas de la Capilla de San Laureano

Retablo de la Capilla de San Laureano

Retablo de la Capilla de San Laureano

Retablo de la Capilla de San Laureano



Retablo de la Capilla de San Laureano

Retablo de la Capilla de San Laureano

Retablo de la Capilla de San Laureano

Sepulcro del cardenal LLuch y Garriga Retablo de la Capilla de San Laureano

Cuadros con la vida de San Laureano  y Sepulcro del cardenal LLuch y Garriga Capilla de San Laureano

Sepulcro del cardenal LLuch y Garriga  de la Capilla de San Laureano

Cuadros de la Capilla de San Laureano


Cuadros de la Capilla de San Laureano

Cuadros de la Capilla de San Laureano

Cuadros de la Capilla de San Laureano

Cuadros de la Capilla de San Laureano

Cuadros de la Capilla de San Laureano

Vidriera de la Capilla de San Laureano

Vidriera de la Capilla de San Laureano


Bancos de la Capilla de San Laureano


Altar de Culto del Cristo de los Estudiantes 

Altar de Culto del Cristo de los Estudiantes 


Fachada de la Parroquia del Sagrario 

Plano de la Capilla de los Jácome 

Reja de la Capilla de los Jácome 

Reja de la Capilla de los Jácome

Reja de la Capilla de los Jácome


Reja de la Capilla de los Jácome

Reja de la Capilla de los Jácome

Relieve de la santa Faz 

Retablo de la Capilla de los Jácome

Retablo de la Capilla de los Jácome

Retablo de la Capilla de los Jácome

cuadro de la Piedad Retablo de la Capilla de los Jácome



Testigo de limpieza del Retablo de la Capilla de los Jácome

Vidriera de la Capilla de los Jácome

Exvotos de la Virgen de la Angustia Capilla de los Jácome

(VISITA) CAPILLAS DE LA CATEDRAL CAPILLA DE SAN LAUREANO y CAPILLA DE LOS JÁCOME / ATRIUM / Guía Emilio Rubio / Capilla de San Laureano  dotada en el siglo XV por los canónigos Alfonso de Gea, aquí  enterrado;  en 1700 se empieza la decoración, primero fue arzobispo y después un canónigo;  otra capilla , la del muro de los pies, de  patrocinio privado, a partir de los Linden y Jácome , Capilla de los Jácome y Linde solicitan derechos para dotar y decorar una capilla;  CAPILLA DE SAN LAUREANO primera que se aboveda,  en 1412 se dice misa,  en la fase inicial de la construcción del nuevo templo,  pero no está confirmado,  el plan de la Catedral definitivo es de 1433,  la mezquita aljama se usa como templo cristiano de 1286 a 1386,  100 años;  se retrasó por la negativa de Enrique III a trasladar la Capilla Real donde estaban enterrados ciertos Reyes,  la mezquita se derriba en 1401 y es muy pronto para dar misas 1412,  pero es un momento convulso de España,  en 1401 se estaba en sede vacante el arzobispado, este tenía capacidad de gestionar recursos para empezar la construcción,  sin embargo el proyecto se paraliza,  pero había ambiente anti musulmán,  espíritu belicista,  contra el Reino de Granada,  se produce un derribo por los efectos del terremoto de 1356 y por no querer un edificio musulmán,  también vienen grandes familias y se quieren enterrar en el Patio de los Naranjos,  en 1401 se establece un muelle de piedra para desembarcar los materiales;  arzobispo Juan de Cervantes 1453 y Alfonso de Gea 1417 , con Juan de Cervantes se aboveda esta capilla,  es Capilla Mayor,  Capilla Real con el altar mayor primitivo;  Capilla Mayor después fue Cátedra de Moral,  el Colegio de San Miguel a partir de Alfonso de Gea y de Vicent de Lamperez y Blázquez propició la dotación artística de la capilla,  cuadros y rejas del 1702 a 1716, la vidriera es de 1572 de Vicente Menardo el último de los cuatro grandes vidrieros:  el primero Enrique Alemán en torno al 1400,  Arnau de Vergara y Arnau de Flandes después Vicente Menardo y posteriormente los vidrieros conservadores;  vidriera muy unida al estilo gótico,  se recuperó su incorporación a los templos y edificios en el XIX, vidriera de San Laureano a los lados San Leandro y  San Isidro con la característica de una gama de colores muy extensa,  amarillo de plata,  la trama color depende del grosor,  los emplomados reciben distintos grosores;  pintura de mucha calidad y temática verotestamentaria , cuadros de Esther y Asuero y el otro de Lot y sus hijas,  había mucha pintura italiana por existir muchos canónigos de este país que veían una oportunidad de ascenso social,  la pintura italiana de la Catedral es valiosa y avanzada,  ahora mismo importa mucho la visita turística y por eso han colocado aquí estos cuadros,  antes lo único que importaba era el culto;  las familias italianas se interesaban en integrarse y se mezclaban con la burguesía y las clases sociales altas de la ciudad;  sepulcro de LLuch Garriga obispo de Barcelona,  tumba en 1885 de Agapito Vallmitjana espléndido trabajo de las capisayos episcopales, como obispo ayudó a los enfermos de peste;  retablo de roldanesco , con la vida de San Laureano,  algunas propuestas de Martínez Montañés la proliferación de imágenes es avanzado,  coincide con una etapa de crisis, viven Murillo y los escultores famosos,  con Justino de Nevé y Miguel de Mañara todavía hacen mecenazgos importantes,  las Academias de Arte ya no son tan influyentes; en la época de los Borbones,  Sevilla viene a menos,  el código vituricense recoge la vida de San Laureano:  nace en Hungría,  pasa por Milán,  se bautiza,  huye de los ostrogodos,  eran arrianos,  lo nombran obispo de Sevilla,  el rey Teude lo hostiga, tiene un sueño que lo van a ajusticiar,  hace una última misa pidiendo que no se acepte el arrianismo,  retablo el ático martirio de San Laureano,  le cortan la cabeza (en el 522),  la basílica estaba en el Patio de Banderas,  basílica romana,  después visigoda y posteriormente mezquita en El Salvador;  Matías de Arteaga ; cuadro superior San Laureano arropado por un Ángel,  otro cuadro milagro en Marsella, resucita a un niño,  otro cuadro de San Laureano se entrevista con el papá Virgilio,  cuadros interesantes por la arquitectura,  cuadro superior San Laureano curando los tullidos estando en Roma es perseguido por Totila, rey ostrogodo arriano,  San Laureano se va a Tours, a ver el cuerpo de San Martín,  estos mártires vienen del primer milenio,  le cortan la cabeza y habla como un santo cefalóforo, hay  150 santos de este tipo en el martirologio católico;  cuadro de la cabecera interpreta el cuadro de los panes y los peces de Murillo en la Caridad también muy interesante el plano de la ciudad,  las calles alrededor de la muralla,  San Laureano primero se le llamaba de Sevilla (en  España),  de Batán (en Francia)  y de Panonia (en Hungría),  ostrogodos y visigodos ven en el arrianismo una forma de unión política;  Leandro,  Isidoro  y Leovigildo se mueven en el arrianismo,  después ya entran en el catolicismo;  rejas barrocas la última del periodo barroco,  el libro Carpintería de lo blanco de Diego López de Arenas está editado por Martín de Arteaga se consigue a pesar de la expulsión de los mudéjares recuperar esas posibilidades arquitectónicas, Martín Arteaga hace los grabados fabulosos y los textos son de Torre Farfán,  también hicieron otro libro sobre las fiestas de Santa María la Blanca;  los bancos de 1777 para la octava del Corpus,  tapizados por los bancaleros (de la calle González Cuadrado)  recordando a los alarifes de la Escuela de la Campiña,  de Fuentes de Andalucía,  los hermanos Ruiz Florindo ; altar veteado del siglo XIX ;  CRISTO DE LOS ESTUDIANTES se confirmó que era de Juan de Mesa,  según un documento que se encontró dentro de la escultura tras un accidente, ahora se guardan en tubos de puros;  paso de palio dibujos de Joaquín Castilla,  en este altar hay muestras del paso de palio;  PARROQUIA DE LA IGLESIA DEL SAGRARIO inicia en 1612 y primera misa en 1662,  obra de Miguel de Zumárraga;  se abre una puerta de entrada a la Catedral,  por indicación de la Hermandad Sacramental,  junto a esas puertas hay un hueco,  lo reclaman los Jácome y Linden,  pasa después al linaje de los Rojas Solís, siglos XIII y XIV, muchas familias patrocinan capillas,  patronatos de enterramiento en la Catedral,  por ser la iglesia matriz,  los Ponce de León (Medinaceli ), los Guzmán (Medina Sidonia),  después patronatos en los monasterios y después en las parroquias;  este patronato es muy moderno (1658) , los enterramientos 1654 y 1657, CAPILLA DE LOS JÁCOME Y LINDEN los Jácome se casaban entre ellos,  después se casaron con la nobleza sevillana y familias locales,  consiguen ser marqueses de Tablante,  escudo de cruz de oro (Jácome) y escudo de Tres Águilas (los Linden); los Jácome se establecen en Écija, para gestionar los excedentes agrarios,  Piedad o Virgen de las Angustias cuadro de Juan de Roelas,  estudia con Tintoretto y Bassano,  se trae el lenguaje del naturalismo,  inspiró a Francisco Herrera el viejo, Velázquez y Alonso Cano,  son el momento álgido del naturalismo,  alcanza su apogeo,  los maestros todavía vivían del Renacimiento,  el cuadro no es del periodo de los Jácome,  era una advocación anterior, advoca a la Virgen de la Angustia o una Piedad,  simplicidad de colores y complejidad de las ropas, de  1609 a 1652 estuvo en otro sitio,  vidrieras pequeñas,  modernas,  retablo de Francisco Dionisio de Ribas,  otros hermanos Gaspar y Juan,  son de Córdoba y se asientan en Sevilla,  los reclama Martínez Montañés,  los Rivas terminaban las obras de Martínez Montañés,  en San Lorenzo las esculturas son de Martínez Montañés y los relieves son de los Rivas,  columnas salomónicas primeras de la arquitectura, ( ya antes se había puesto en una custodia),  las espiras no son tan acusadas,  hay que destacar los niños Jesús,  aquí son atlantes,  las cabezas,  los modelos infantiles,  en 1656 Sevilla está recuperándose del varapalo de la peste;  relieve de la Santa Faz con la Fe a un lado y la Esperanza a otro, ángeles a medio limpiar,  escudo de Tres Águilas coronado con yelmo y otro águila y escudo con cruz dorada, yelmo y coronada con lebrel;  ángeles pasionarios recogen sudario y lanza; yeserías se vuelven importantes en la arquitectura, almohadillado muy característico de los Rivas;  reja barroca diseño parecido al de Valdés Leal; ex votos  de la Virgen de la Angustia

 

FICHAS ATRIUM

 

CAPILLA DE SAN LAUREANO Cronología: 1401-1412 Autores: Anónimo DATOS HISTÓRICOS. La capilla de san Laureano, inaugurada en 1412, fue la primera que se terminó de la nueva catedral. A partir de esta fecha desempeñó las funciones de capilla mayor durante varias décadas. La decisión de derribar la mezquita aljama y levantar un nuevo templo (medida adoptada tras los daños sufridos por la fábrica en el terremoto de 1356 e impulsada por el ambiente bélico contra el reino musulmán de Granada) se toma en “sede vacante” tras la muerte del arzobispo Gonzalo de Mena en 1401. Es decir, no se contaba con el apoyo de un prelado ni tampoco con el del rey Enrique III, que más bien al contrario, puso todas las trabas posibles para el proyecto. Es lógico pensar que el Cabildo quisiera concluir la primera capilla con celeridad, para así demostrar su independencia e impulsar la construcción. En esta capilla se entierra el arzobispo Egea, el primero que ejerce como tal durante el proceso constructivo. Siempre ha tenido la misma advocación, aunque consta que estuvo presidida por una imagen de la Piedad en 1530, que luego fue reemplazada por un Ecce Homo y más tarde por un Cristo Resucitado y las Marías. Durante los siglos XVII y XVIII se alojó en ella la Cátedra de Moral. PATRONATO. El primer patrón de la capilla debió ser el citado Alonso de Egea, enterrado aquí en 1417. Egea fue nombrado administrador de la diócesis de Sevilla y más tarde Patriarca de Constantinopla. En mayo del año 1410 participó en la toma de Antequera acompañando al infante don Fernando y organizando la división de la ciudad en parroquias. En su sepulcro puede leerse “Aquí yace el reverendísimo señor Don Alonso de Egea, patriarca de Constantinopla, y administrador perpetuo de la iglesia de Sevilla. Finó miércoles víspera del Corpus Christi a 9 de junio de 1417”. El segundo patrón fue Valentín Lampérez y Blázquez, primero rector del colegio de san Martín de la universidad de Alcalá de Henares y luego catedrático de moral en Sevilla, a quien se atribuye el encargo de la actual decoración del recinto (retablo principal y pinturas del ciclo hagiográfico de san Laureano). A su pluma debemos la Disciplina vetus ecclesiastica a sanctissimo D.N.D. Innocentio ..., un tratado de moral publicado en la imprenta de Lucas Martín en 1696. Su losa sepulcral se dispone junto a la de su predecesor en el patronato. DOTACIÓN ARTÍSTICA. Arquitectura: La construcción de esta capilla se encuadra dentro del diseño general del templo, cuyo plano primitivo, según ya comentamos, se atribuye por algunos especialistas a Alonso Martínez (H.1396) y por otros a Isambret (H. 1433). Su estilo responde al gótico norteño predominante en la fábrica, cuya decoración se limita a subrayar las líneas arquitectónicas. Retablos y esculturas: El retablo que preside la capilla, de autor desconocido, está dedicado a su titular y se compone de banco, un cuerpo y ático. El cuerpo se divide en tres calles por columnas salomónicas de tercio inferior abalaustrado. La escultura que preside el conjunto representa al santo obispo revestido de pontifical con mitra y capa pluvial, llevando en sus manos un cuchillo, símbolo de su martirio. A su derecha se sitúa un relieve con el santo arrodillado ante un tabernáculo, dentro de un templo, y a la izquierda otro relieve nos lo muestra confortado por un ángel. Ambas escenas presentan en sus laterales columnas salomónicas con tercio inferior retallado. El martirio (decapitación), acaecido en el siglo IV por orden de Totila, centra el remate, también dividido en tres calles, apareciendo en los laterales las imágenes de san Miguel y san Rafael. Coronando el conjunto se distingue una mitra atravesada por la azucena, símbolo parlante del santo. Este retablo, de autor desconocido, se puede fechar entre 1700 y 1702, y fue patrocinado por el canónigo Valentín Lampérez y Blázquez. En el muro frontero a la entrada se dispone el sepulcro del cardenal don Joaquín Lluch y Garriga. Este prelado regentó la cátedra de teología moral en el seminario de Barcelona y en 1854, con motivo de la peste declarada en la ciudad condal, se distinguió por su heroico servicio al frente del hospital de Santa Cruz. En 1877 fue nombrado arzobispo de Sevilla. Mientras gobernaba esta sede fue elevado a cardenal, si bien no pudo recibir el capelo pues murió de forma repentina en 1882. El sepulcro fue realizado en 1885 por Agapito Vallmitjana. Preside el conjunto la figura del prelado revestido con capisayos episcopales, genuflexo ante el reclinatorio y en profunda oración. En la parte baja se dispone un podio enriquecido por escudos y ángeles en los ángulos. Pintura: Una serie de cinco lienzos bellamente enmarcados ocupan la parte superior de los muros sur y oeste de la capilla. Fueron realizados hacia 1702 por el pintor y grabador Matías de Arteaga. Gozó Arteaga de gran consideración en el ambiente artístico sevillano del tercer tercio del XVII, siendo uno de los fundadores de la Academia de Pintura en 1660. De entre su trabajo como grabador destacamos la ilustración del libro de Diego López de Arenas Breve compendio de la Carpintería de lo blanco y los grabados del libro de Torre Farfán sobre las fiestas de la catedral por la canonización de san Fernando. La noticia sobre la autoría de las pinturas de la capilla de san Laureano nos la da el canónigo Loaysa en 1709 al señalar que dicho espacio es propiedad del capitular Valentín Lampérez y Blázquez, quien encargó a Arteaga la decoración del recinto donde, poco después, mandó que le enterrasen. Las cinco pinturas representan La resurrección de un joven en Marsella por intervención de san Laureano, San Laureano ante el papa Virgilio en Roma, La curación de un tullido en Roma por intervención de san Laureano, El martirio de san Laureano y La entrega de la cabeza de san Laureano al clero de Sevilla. Al fondo de esta última pintura aparece una interesante vista de la ciudad, con sus murallas y la puerta del Arenal en primer plano, mientras que sobre el caserío destaca el perfil de la catedral con la Giralda. En el muro sur, frontero a la entrada de la capilla, flanqueando el sepulcro del cardenal LLuch, se han dispuesto recientemente y tras su limpieza dos excelentes pinturas italianas de escuela barroca boloñesa, de hacia el 1600, que representan la de la izquierda a Lot y sus hijas y la de la derecha a Esther y Asuero. Hasta época reciente se guardaron en el vestuario de los canónigos, donde las estudia y cataloga el profesor Valdivieso en 1984. Vienen estas obras a sumarse al amplio catálogo de escuela italiana que custodia el templo, siendo además especialmente interesantes por lo singular de su iconografía. Artes Suntuarias: En la parte superior del muro sur de la capilla se dispone una vidriera que representa a san Laureano en el centro con san Isidoro y san Leandro en los laterales, obra realizada por Vicente Menardo en 1572. El formato de la vidriera en arco apuntado viene a acentuar las líneas arquitectónicas góticas de la capilla, si bien el estilo de la representación es plenamente renacentista, aunque el distinto canon utilizado para los personajes nos remite a la narrativa medieval. Menardo es el último vidriero con personalidad y formación interesantes que trabaja en la catedral. La primera mención que tenemos acerca de su actividad data del 28 de junio de 1560 en que había terminado la vidriera de la Conversión de San Pablo de la capilla de Santiago. Poco después, en 1565, es nombrado vidriero de la catedral, cargo en el que sucede a Arnao de Flandes. La labor de Menardo en la catedral es representativa de un artista que se encuentra con un programa de vidrieras casi concluido y para el que solamente puede realizar algunas piezas que faltaban o reparar los daños y pérdidas que se iban produciendo en las existentes. Sus marcos arquitectónicos denotan una asimilación propia del manierismo romano, muy distinta de las decoraciones platerescas de grutesco que encontramos en la obra de Arnao de Flandes. En la producción de Menardo hayamos un descenso en la actividad vidriera de la catedral. Aunque es el último maestro del siglo XVI que realiza vidrieras de cierta importancia, con él se inicia la presencia de maestros que son simples conservadores, como Sebastián de Pesquera y Antón Pérez. Distribuidos por distintos ámbitos de la catedral, también en la capilla que nos ocupa, se disponen una serie de bancos realizados para ser dispuestos en el presbiterio durante la octava del Corpus Christi. Son piezas anónimas de excelente calidad, exponentes del último barroco en el que predominan los perfiles mixtilíneos de compleja composición. Es tradición no escrita que este conjunto de bancos fue sufragado por los propios canónigos. Son piezas de diseño suntuoso, acentuado por la movida línea de los respaldos. Tanto éstos como los asientos son de terciopelo rojo, llevando un galón de plata y ofreciendo bordados, tipo repostero, en oro y plata con el escudo del Cabildo. Otro contrapunto de color aporta el dorado en oro fino al agua de los elementos de madera, que van, asimismo, finamente torneados. Por último citamos la excelente reja que cierra el recinto, de 1702, y el frontal de la mesa de altar, del siglo XIX, compuesto por una piedra de ágata con hermosos veteados de formas concéntricas

CAPILLA DE LOS JÁCOMES Cronología: 1658-1675 Autores: Anónimo DATOS HISTÓRICOS. La capilla fue edificada después de 1658, cuando el Cabildo catedralicio decidió abrir una puerta que comunicase con la nueva iglesia del Sagrario. Para ello se escogió como lugar más idóneo el que ocupaba la pila del bautismo, de manera que ésta hubo de ser trasladada al emplazamiento que hoy ocupa en la vecina capilla de san Antonio. Aprovechando el hueco que quedaba en el muro junto a la nueva puerta se mandó labrar una pequeña capilla con el fin de venerar en ella el cuadro de la Virgen de las Angustias de Juan de Roelas, que gozaba de gran devoción en la ciudad. PATRONATO. En 1658 la viuda y herederos de don Adrián Jácome (rico comerciante natural de Brujas, donde fue Regidor, asentado primero en Écija y a finales del XVI en Sevilla) siguiendo las disposiciones testamentarias de éste, solicitaron del Cabildo la adjudicación de la capilla como lugar de enterramiento de la familia Jácome y sus descendientes. Reunido el Cabildo en sesión ordinaria el 29 de julio de 1658 se acordó acceder a la petición y el día 8 de agosto el arcediano don Alonso Ramírez de Arellano de una parte, y doña Francisca de Linden y su hijo don Adrián Jácome de Linden por otra (I marqués de Tablantes desde 1694, título que refiere el pago homónimo de Espartinas) formalizaban la cesión. Además de una cantidad en metálico, la familia debía encargarse de todo lo concerniente al exorno de la capilla. En la actualidad sigue utilizándose como enterramiento por los descendientes. Los escudos de los Linden (tres águilas de plata), Jácome (cruz llana de oro), Rojas (cinco estrellas de plata) y Solís (sol figurado) aparecen en la reja, banco del retablo, respaldo de bancos y lápidas funerarias. DOTACIÓN ARTÍSTICA: Arquitectura: Desconocemos el autor de la capilla, aunque bien pudiera vincularse su diseño con la producción del maestro que entonces trabajaba en la terminación de la iglesia del Sagrario, Lorenzo Fernández Iglesias. Las paredes y el techo del interior, así como la portada, están recubiertos de yeserías barrocas realizadas hacia 1675 que repiten los motivos decorativos del retablo, siendo por tanto posible que en su diseño interviniera Francisco Dionisio de Rivas. Retablos y esculturas: El retablo que preside el espacio es obra de Francisco Dionisio de Rivas, ejecutado entre 1658 y 1660. Se compone de banco, un cuerpo dividido en tres calles y ático. En el centro del banco se ubica una cartela donde aparecen inscritas las palabras de la consagración de la misa. El lienzo central está enmarcado por bellos roleos y rematado por una cabeza de ángel sobre la que se dispone la paloma del Espíritu Santo. Los intercolumnios se decoran en su base con los escudos de la familia Jácome sobre los que se dispone una ménsula que, a modo de peana, sostiene dos imágenes de ángeles pasionarios. Por encima de éstos se abren dos ventanas a modo de transparente, añadidas al conjunto en 1777, decoradas con vidrieras que muestran varios símbolos de la pasión de Cristo. El ático está presidido por un relieve de la Santa Faz a cuyos lados, dispuestas sobre los laterales del frontón curvo, aparecen imágenes de la fe y la esperanza. Se considera este retablo el primero en el que su autor utiliza la columna salomónica con finalidad estructural, rasgo definidor de su producción futura. El almohadillado de fondo es típico también del taller de los Ribas. Otro retablo catedralicio realizado por este autor es el que preside la capilla de la Concepción Grande. Pintura: Preside el retablo una pintura con el tema de la Piedad o Virgen de las Angustias realizado por Juan de Roelas en 1609. El naturalismo pictórico se introduce en la escuela sevillana gracias a la producción de Roelas, que asimila con maestría los nuevos conceptos estéticos emanados de Trento gracias a una más que probable estancia en Venecia, donde conocería de primera mano la obra de Tintoretto, Veronés y sobre todo de Bassano, cuyos efectos lumínicos se reconocen en buena parte de su obra. De origen incierto (los últimos estudios afirman que nació en Flandes), llega a Sevilla en 1604, donde permanece hasta su muerte en 1624. Durante estos años se convierte en el mejor pintor de la ciudad, asumiendo su taller los principales encargos, tanto de la nobleza (también trabajó para los Medina Sidonia en Sanlúcar), como de la iglesia. Su renovador estilo rompe de manera radical con el manierismo de impronta rafaelesca aún vigente en Sevilla y orienta la escuela local hacia el camino del barroco, que en breve recorrerán artistas de la talla de Velázquez o Alonso Cano. La Piedad que preside la capilla de los Jácomes es obra mal conservada pero en la que aún se aprecia un excelente dibujo, sobre todo en las figuras de la Virgen y san Juan. Otras pinturas de mediana calidad decoran los muros laterales de la capilla; a la izquierda vemos un San Pedro Arrepentido, que parece de mediados del XVII; bajo ésta un cuadro del XVIII de reducidas dimensiones con el tema de La dormición de la Virgen, que por su factura suelta creemos un boceto; por último, en el muro de la derecha, encontramos un Jesús camino del Calvario, modesta obra del siglo XVII de estilo tenebrista de algún seguidor de Zurbarán. Artes Suntuarias: La capilla se cierra por una magnífica reja con los blasones de la familia ejecutada hacia 1670, que recuerda los diseños de Pedro Roldán para el rejero Sebastián Conde, aunque tampoco es ajena a los que realiza Juan de Valdés Leal para la capilla de la Concepción Grande, obra que se asienta en 1666. A los pies de los muros laterales se ubican dos tresillos de madera con la heráldica de los patronos, buenas obras de mobiliario de finales del siglo XVIII.